Cerca de 40 médicos especialistas en ginecología, provenientes de Arica, Iquique, Calama Antofagasta y Santiago,  participaron en el primer curso acreditado por una universidad que se dicta en Iquique, y cuyo objetivo es sumar conocimientos en ecografía Doppler.

La particularidad de la capacitación de dos días, denominado curso teórico práctico de aplicación de Doppler en ultrasonografía obstétrica, consistió en la implementación de una sala paralela al auditorio, en donde los docentes realizaron demostraciones con pacientes para enseñar el uso de equipos con la última tecnología en ecografías.

 “La ideas es manejar esta tecnología y estar capacitados cuando contemos con estos equipos, que permiten incluso solicitar y confirmar diagnósticos con especialistas de otras ciudades en muy corto tiempo. Esto reduce tiempos de respuesta y también los costos de traslados de las pacientes”, explicó uno de los organizadores del curso, el ginecólogo del hospital de Iquique, Nelson Garrido.

El coordinador jefe de la unidad de Ginecología de la universidad de Antofagasta, Erick Fritz participó como docente en el curso y manifestó que esta máquina “nos permite ver al feto como un verdadero paciente, analizando su comportamiento, sus respuestas a distintas cosas y adelantándonos a alguna posibilidad de problemas físicos. Podemos  tomar buenas medidas para evitar algún daño, ya que tiene muy buenos resultados obstétricos”, explicó.

Fritz asegura que mientras tecnología avanza a pasos agigantados, este tipo de equipos permiten tener una muy buena resolución en pacientes más complicadas y cuyos fetos son más pequeños.  “Vamos haciendo un diagnóstico cada vez más precoz en pacientes cada vez más difíciles y podemos empezar a ver cosas que antes parecían inimaginables, como medir los flujos de una arteria de un riñón, por ejemplo”.

Tanto los participantes en el auditorio, como médicos de otros lugares del país pudieron presenciar estos controles médicos de manera simultánea, gracias a la conexión en vivo de cámaras instaladas en puntos estratégicos del box de atención donde trabajaron con pacientes voluntarias, quienes incluso vinieron desde otras ciudades para someterse a dicha evaluación médica.