En medio de la decoración infantil que caracteriza a sus dependencias, hoy ya son cinco los pacientes adultos que han recibido tratamiento allí por Coronavirus.
Acostumbrada a recibir a pacientes graves menores de edad, la Unidad de Paciente Crítico Pediátrico, UPCP del hospital de Iquique, este último mes debió adaptarse a las necesidades del único establecimiento de salud que atiende a enfermos complejos con Coronavirus, y por primera vez destinan sus instalaciones y personal para recibir adultos que requieren de ventilación mecánica.
Para lo anterior debieron transformarse completamente en una UCI Covid, con tres cupos para pacientes adultos, y trasladar sus camas de UCI pediátrica hasta el interior del servicio de Pediatría, en la que hasta la actualidad afortunadamente no han ingresado pacientes ni por Coronavirus ni por otra patología en la que requieran de un respirador artificial.
Preparación
Esta es la cuarta semana en que se encuentran en esta situación, para lo cual sus funcionarios se prepararon con capacitaciones realizadas por la UCI adultos para actualizar los conocimientos en la atención de este tipo de pacientes. “Hemos tomado este desafío con mucha responsabilidad, nuestro equipo está muy comprometido, además tiene mucha mística, entrega y ganas de aprender. Lo importante es sumar y apoyar en lo más que podamos en esta pandemia”, comentó el médico jefe de la UPCP, doctor Luis Blohm.
En el equipo, conformado por 34 funcionarios; entre médicos; enfermeros; técnicos paramédicos; auxiliares y kinesiólogos, está la enfermera Giselle Fuentes, quien reconoce que en un inicio este nuevo escenario “fue bastante complejo, porque estábamos asustados por la posibilidad de contagiarnos y llevar la enfermedad a nuestras casas, pero después que llegó el primer paciente nos fuimos acostumbrando a las nuevas medidas de protección y cuidado”, dijo Fuentes.
La doctora María José Villarroel, quien lleva un año en esta unidad, sostuvo que “nunca imaginamos que íbamos a estar haciendo esto. La mayoría hemos tenido experiencia en la atención de pacientes adultos, pero no adultos graves, pero en la medida en que los contagios por Coronavirus avanzaban, pensamos que esta situación podía pasar, así es que nos preparamos bastante y nos hemos ido adaptando muy bien. Además de la UCI adultos, por nuestra experiencia con pacientes críticos somos la mejor opción para ver a los enfermos Covid”, explicó Villarroel.
Una de las funcionarias más antiguas de la UPCP, es la auxiliar Gladys Verdugo, quien lleva 15 años en dicho servicio clínico en el hospital de Iquique, y entre sus labores está la de limpiar y sanitizar desde la puerta de acceso hasta el último rincón de este servicio, y afirma que “Es un poco raro estar con pacientes adultos. Cuando nos toca limpiar los espacios de los pacientes, siempre aprovechábamos de saludar y conversarles a los niños, pero ahora no se puede porque están muy graves, y además porque con las máscaras que usamos ya no se entiende mucho lo que hablamos”, dijo.
Finalmente todos coinciden en que este trabajo, en el que aseguran que siempre reciben el apoyo y orientación de la Unidad de Paciente Crítico Adulto, mantienen vigente su sello, y que reciben y atienden a los pacientes con Covid-19 con todo el cariño, cuidado, delicadeza y hasta la forma de hablar que siempre han tenido, como si fueran los mismos pacientes pediátricos de siempre.